Una cicatriz es un parche de piel permanente que crece sobre una herida. Se forma cuando el cuerpo se cura después de una cortadura, un raspón, una quemadura o una llaga. Las cicatrices también pueden resultar tras una cirugía donde se corte la piel, infecciones como la varicela o afecciones de la piel, como el acné. Las cicatrices suelen ser más gruesas, así como más rosadas, rojas o brillantes que el resto de la piel.

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La relación del nuevo tejido colágeno con las fibras elásticas nunca va a conseguir una restitución total de la piel, y además en la cicatriz suele haber una reducción de los folículos pilosos, glándulas sebáceas y sudoríparas y por lo tanto, menos funcionalidad que la piel normal.

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En los individuos sanos la restauración de la barrera epidérmica funcional es altamente eficiente, mientras que la reparación de las capas dérmicas profundas es menos perfecta y resulta en la formación de una cicatriz. Las cicatrices pueden ser inestéticas y desfigurantes, producir picor, quemazón, dolor, alteraciones del sueño, ansiedad y depresión.

 

Clasificación de las cicatrices:

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• Cicatrices eutróficas: son aquellas en las que se produce una restitución de la integridad cutánea con una superficie homogénea, sin alteraciones texturales, y sin presencia de alteraciones de la pigmentación o telangiectasias.

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• Cicatrices hipertróficas: son sobre elevadas, eritematosas, de consistencia dura, pero sin exceder los límites del defecto que se ha reparado.

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• Los queloides: son lesiones firmes, de gran dureza, mayor que las cicatrices hipertróficas y en ocasiones de aspecto nodular y color muy eritematoso o rojo-violáceo. Pueden aparecer fuera de los límites de la cicatriz o lesión inflamatoria cutánea.

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• Cicatrices por quemaduras:  Este tipo de lesión oxida el tejido, aumentando la enzima xantina-oxidasa y productos de peroxidación lipídica. Las cicatrices de quemaduras constituyen un grupo especial porque tienen unas características peculiares:

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• Áreas de atrofia.

• Áreas de hipertrofia.

• Alteraciones de la pigmentación.

• Retracciones y limitación del movimiento.

 

En las quemaduras además de la zona necrosada hay un daño térmico en profundidad que en ocasiones puede ser muy importante. En muchas ocasiones se destruyen de forma total los vasos profundos de la dermis.

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• Las cicatrices atróficas: son depresiones de la piel generalmente causadas por la destrucción del colágeno durante enfermedades inflamatorias de la piel como varicela o acné. También pueden aparecer después de una cirugía, traumatismos o tras tratamientos con láser. Suelen aparecer como alteraciones eritematosas y a lo largo del proceso de cicatrización se convierten en cicatrices hipopigmentadas y fibróticas.

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• Las cicatrices eutróficas inestéticas: son muy visibles por su forma o color: se han ensanchado, están hundidas o deprimidas, los bordes no están perfectamente aproximados y forma un escalón, están elevadsa respecto a la piel normal, se han hipertrofiado o han formado un queloide.

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• Las telangiectasias: son frecuentes por un proceso inadecuado en exceso de la neoangiogénesis. Suelen ocurrir en cicatrices grandes, y sobre todo cuando para el tratamiento de las mismas se realizan infiltraciones con corticoides.

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